Los que han sacado la casta en esta difícil situación mundial a causa de la pandemia por el virus COVID-19 son sin lugar a dudas los médicos, enfermeras y demás personal de salud.
Las jornadas de trabajo son agotadoras y deben llevar siempre cubierto todo su cuerpo y cara como forma de protección para no contagiarse. Pero en busca de alentar a sus pacientes y tratar de darles aliento Robertino Rodríguez médico de San Diego tuvo una excelente idea.
Comenzó a utilizar una fotografía de él sonriendo pegada a su traje para que los pacientes vieran más allá de las caretas que llevan puestas por horas y de esta forma hacer más amigable su apariencia ante sus pacientes enfermos.
Sus demás compañeros hicieron lo mismo y rápidamente esta acción se volvió tendencia para el personal de salud que trata a pacientes con coronavirus, dando una sonrisa tranquilizadora que hace la diferencia en momentos tan complicados